Mi primer muñeco de nieve

No tengo mucho tiempo puesto que me voy en hora y cuarto a Dublín y no he hecho la maleta aún, pero voy a contar algo, porque esto no se tiene todos los días.

Ayer me fui de aquí a las doce, más o menos (no, no trabajando, haciendo el pinga). Sabía que había nevado, pero pensaba que un poquito. Cuando salí de aquí se me vieron esfumadas las intenciones de dormir. Salí y ¿qué vi? un montón de nieve. Además se veía muy bien porque las pocas luces que tenemos alrededor se reflejaban por doquier. Fabuloso!!! Me puse a gritar y a saltar sobre la nieve. Y corriendo, como alma que lleva el diablo, me fui a casa, a ver si pillaba a Caroline despierta para pedirle la cámara y hacer algunas fotos.

Salí de casa y me puse a fotografiar todos los copos que caían y todo lo que veía; incluso llegué a hacer un muñeco de nieve (a snowbaby). Al final me tuve que ir a casa porque empezó a llover.

Esta mañana me desperté y volví a ver tooodoooo blanco.... Una pasada. Fui al observatorio, y desde que tuve un momento (y vi que mi jefe no estaba) cogí a Anthony y me lo llevé pa'fuera a hacer un muñeco de nieve en condiciones. ¿cómo? pues nos ponemos en lo alto de una colina con una pequeña bola de nieve (snowball) y la hacemos rodar colina abajo. ¿qué conseguimos al final? Dos bolas, una para ponerla encima de la otra. Pero... la pequeña pesaba demasiado para ponerla encima de la otra, así que la rompimos y la fuimos poniendo a cachos. Luego fuimos poníendole la cabeza, y bueno, finalmente terminó siendo una muñeca de nieve....



A parte de esto, después de un lunch (almuerzo inglés) gratuito, porque venían no se quienes. Me cogí a Anthony again (otra vez) y me lo llevé a jugar al "platillo" (o frisbi) sobre la nieve (con manga corta, por supuesto). Y aún seguía mi muñeca, sin cabeza, pero la escencia de su feminidad estába ahí.

Nada más por ahora, espero poner muchas nuevas anécdotas de mi estancia por Dublin cuando vuelva. Hasta luego.
Dublín, ¡¡¡Ahí voy!!!