y... ¿qué pasó en Dublín?

Dublín (Dublin como dicen por aquí) es una ciudad maravillosa, pero antes vayamos a cómo llegué allí.

Salimos de Armagh en el coche de John, él iba para el sur, así que nos alcanzaba. Yo me senté delante, pero aquí no es como allí. Aquí delante, si vas de copiloto, significa que te sientas a la izquierda (ya lo conté el otro día). Pues bien, dos horas y pico sentado a la izquierda en un coche, y sabiendo que me voy a examinar en X'mas (Lease Crismas, navidades por aquí) me lleva a tener sueños cuando duermo de que conduzco (y si que conducía, era el amo de las carreteras...). Sueños aparte llegamos sanos y salvos a la casa de la hermana de Jonathan (donde nos quedaríamos la primera noche). Dejamos las cosas y salimos, a buscar fiesta. Para ir de allí al centro teníamos que coger una guagua, y allí estávamos esperando en la susodicha parada en la que lo único que llegaba era el viento ártico helándonos todo. Mientras esperábamos, Caroline y yo estábamos mirando si venía la guagua en la dirección equivocada, es decir, mirábamos hacia la izquierda. Hay que ver las cosas que tenemos implementadas en nuestro sistema nervioso y no nos damos cuenta. Yo incluso llegué más lejos, pensé que qué raro son estos irlandeses poniendo las paradas de guagua de tal forma que no pudieras ver cuando la guagua viene. Pero no, al final no son tan raros (mas conducen al revés). La guagua llegó y empezó mi diversión... (yo me divierto con el simple hecho de ver gente alrededor).

La ciudad es muy bonita, o al menos lo poco que ví. Era como Amsterdam pero más grande (y según alguna más caro). Era de noche y directamente buscamos un lugar donde cenar y luego por ahí. Fuimos a dos pubs. Todos a los que entré estaban bastante bien, con varias plantas, bien decorados y buen ambiente. En el primero fui al baño y cuando me fui a lavar las manos un tío que estaba allí me echó jabón en las manos, me abrió el grifo, me puso el secador en marcha.... bufff no sabía que hacer, así que salí pitando de allí. No sé, como me descuidara lo mismo meaba por mí.
En el segundo y último de esta primera noche bailé como hacía tiempo que no lo hacía, no me refiero que bailara muy bien, o muy mal, sino que bailé canciones como "bamboleoo" y "Para bailar la bamba..." (¿las recuerdan?). De esta noche no tengo más que contar que dormí con Jonathan... Los dos roncamos que daba gusto oirnos.

Buenos días!!!!! así me despertó Jonathan, me dijo no sé que más en inglés y yo seguí durmiendo. No se cuanto pasó cuando volvió a despertarme. Fuimos a un pub-reustarante a ver el partido de Irlanda-Rumanía (de Rugby). Primer partido que veo entero. Éramos seis, El hermano de Jonathan y un amigo suyo, otra chica de Canadá, y nosotros tres. Intentaban explicarme las reglas del juego, y trataban convencerme, mientras veía a unos cuantos sangrándoles la nariz, que no era un deporte violento... De ahí fuimos a coger la habitación en el albergue (cogimos las últimas camas, en una habitación de 16).

Luego de compras, o de ver tiendas, porque comprar, lo que se dice comprar, nada de nada. Pero está guay caminar entre toda la gente que hay por ahí.

La noche volvió a llegar y fiesta again. El cumpleaños de Jonathan es el miércoles, luego ha quedado con los amigos de aquí para salir esta noche. Fuimos a otro pub, que estaba muy bien también. Eramos un montón, que nos sentamos en unos sofás y taburetes alrededor de una mesa que allí había; y cada cierto tiempo, algunos nos levantábamos y nos intercambiábamos los sitios, así hablábamos todos con todos. Estava divertido, pero yo necesitaba un poquito de bailoteo, así que de vez en cuando me ponía a pegar botes por ahí. Viendo el resto del bar este y la cantidad de gente que andaba por allí.

Al cerrar terminó la fiesta, pero la fiesta seguía en la calle. Gente por doquier (y eso que hacía frío, y si lo digo yo...). Estábamos hambrientos, y sorpresa, aquí a las 3 están los mcdonalds, burrikin y otros desconocidos abiertos.

Ya de Dublín no puedo contar mucho más, ya que al día siguiente (domingo) nos despertamos en el albergue y fuimos a Howth (pueblo costero) en tren. El pueblo estaba muy bien (pero hacía un fríooooo), caminamos por el muelle y un trompetista hacía las delicias de cualquier caminante (que, a pesar del frío, no eran pocos).

Ya nos volvimos para Armagh, pero Caroline y yo solos. ¿qué pasaba con Jonathan?
Pues al día siguiente, cuando el llegó a Armagh le escucho hablando de un concierto de Bob Dylan, a lo que le pregunto que cuando fue. Y había sido el domingo por la noche... Por eso el se quedó allí y claro con mi fabuloso ingleés no me enteré de nada.

Esto fue lo que dió de sí Dublín (al menos por ahora), el próximo fin de semana ¿a dónde iré?

Por cierto, Adri, le conte a mi muñequita lo de Pepo, y le entró una calentura que se derritió, no sé, supongo que tendré que esperar a que vuelva a nevar para que me diga si se viene conmigo para allá o exigirá que venga Pepo para acá (ya sabes como son las mujeres, y más las frias como esta ;oP ).